† Despacho de la Capitana †

Una enorme sala, decorada con motivos de la Segunda División así como de las Fuerzas Especiales, bien iluminado. Un enorme póster con un rombo en negro y con dos líneas paralelas, un "ni" en katakana, símbolo de la Segunda División, y junto a éste, otro gran póster blanco con dos rectángulos de grueso trazo, cruzados de tal forma que quedan perpendiculares entre sí; aquél se trataba del símbolo de las Fuerzas Especiales. Tenía asimismo muebles con adorno color anaranjado o morado, a saber: asientos, un armario, una nevera, un par de mesas y al fondo de la enorme sala, una mesa rectangular con una pila de papeles, una pequeña, apagada y morada lámpara, y un sillón, de madera de roble y decorado de tal forma que destacaba sobre el amueblado del despacho.

La Capitana, Shihofon Yoruichi, se asentaba en su sillón, frente a una rectangular mesa de tamaño normal. Un bote de tinta obscura se hallaba a un lado de la joven, y frente a ésta una pequeña pila de papeles, los cuales firmaba o completaba con una letra pulcra y estilizada, usando kanji, katakana o hiragana, confirme iba el caso, con una fina pluma de águila sintética. Junto a una de las lamparillas de la mesa habían dos fotos, una con su hermano menor, y otra con Kanda Yuu, el Bound al que conoció un día qn los últimos cien años.

De momento, no esperaba nada especial, aunque estaría alerta en todo momento por si la iban a visitar o lo que sea.

Gil estaba de paso por todos lso escuadrones y de pronto le vino la idea de visitar a la señorita Yoruichi la capitana del segundo escadron especial, en eso recordo que ese edifico estaba totalmente vigilado ys eria dificil entrar, lo epnso un rato y de momento dijo algo activo -waaa esto sera genial sera como una aventura y visitare a yoruichi-sama de una vez jeje- gil emprendio su camino y al llegar al la divison vio las habitaicones de la segunda division rodeado de arboles, en eso enseguida comenzo a ausar el shumpo cuidadosamente por todo el bosque hasta llegar a la torre de yoruichi, vio hacia arriba y volvioa usar el shumpo llegando a asi a el balcon de yoruichi apenas estaba entrando a el unos ninjas de la segnda division le tenian las zampakutou en el cuello y enseguida vio a yoruichi y le dijo algo nervioso-etto yoruichi-sama podria decirle a sus miembros del escuadron que me quiten las zampakutou del cuello jejeje- luego se espero a que yoruichi respodiera.

-etto yoruichi-sama podria decirle a sus miembros del escuadron que me quiten las zampakutou del cuello jejeje- luego se espero a que yoruichi respodiera.

Escuchó aquellas palabras desde donde estaba, procedentes de la puerta del despacho, así que se levantó y abrió las puertas, viendo a esos dos miembros de la Milicia Ejecutora, teniendo por el cuello amenazaodramente al Teniente del Quinto Escuadrón.

SHIHOFON YORUICHI:- ¿Qué quieres?- inquirió con seriedad, tras lo que mandó a sus hombres que le quitasen las zanpakutoh al nervioso Teniente, sólo para que éste dejase de estar tan histérico o nervioso.

Observó impasible al Comandante General. No le asustaba aquella frívola sonrisa suya, aunque le mantenía cierto respeto. No le hacía demasiada gracia aquella sarcástica sonrisa. Por respeto, y como Cross Marian era el Comandante General, hizo retirar a sus dos hoombres y se inclinó, inclinando asimismo su cabeza.

SHIHOFON YORUICHI:- Buenas tardes.. ¿Qué le trae por aquí, Comandante General?- inquirió parcamente la Capitana de la Segunda División tratando con demasiado respeto al omandante General. Esperaba que no se le ocurriera una de sus bromas pesadas.

Asintió seria y firmemente ante las palabras del Comandante General sin mediar palabra alguna, tras lo que se levantó, una vez el Comandante General Cross se marchó. Vio con suspicacia al Teniente del Quinto Escuadrón antes de marcharse a terminar los informes que le debía al Comandante General.

SHIHOFON YORUICHI:- Si no tienes nada que decir, márchate a realizar la tarea que ordenó el Comandante General. -espetó fría y firmemente, cerrando tras de sí la puerta del despacho, para así después asentarse en si sillón tras la mesa y seguir con su trabajo, es decir, con los informes que debía de terminar, los cuales hacía con un esmero imparable, con una letra pulcra y estilizada, usando hiragana, katakanas o kanjis según se requería, con una caligrafçia impecable.

-bueno solo queria visitar a la persona que me ayudo a ser shinigami y sub-capitan jeje y talvez pudieramos jugar un poco de poker mas tarde... aurica quiere jugar jaja- la espada comenzo a sumbar por como le habia nombrado gil -jeje aurica esta molesta bueno que me responde señorita yoruichi- se quedo esperando su respuesta.

Escuchaba las palabras del Teniente mientras completaba los informes que le había pedido el Comandangte General. En el silencio sepulcral se escuchaba el rasgueo de la pluma de águila sintética que usaba para escribir. Se daba cuenta perfectamente de que las peurtas a su despacho seguían abiertas.

SHIHOFON YORUICHI:- Ya veo. Una partida de póker.. Jum.. No me interesa en absoluto. - respondió con frialdad la Capitana mientras seguía rasgando con aquella pluma el papel para completar los informes. No le interesaba en absoluto jugar a un juego realmente absurdo de forma que lo aclaró fría y seriamente.

Suspiró pesadamente haciendo una pequeña pausa. Se detuvo de escribir y colocó una pequeña pila de papeles a un lado, pues frente a la Capitana se encontraba otra pequeña pila de informes que completar, y por supuesto lo haría, ya que de por sí eran órdenes del Comandante General Cross Marian. No tendría tiempo para estar con otras personas ni relacionarse, pues su trabajo, eficiente y árduo como habitualmente, era lo primero.

Introdujo la pluma sintética de águila en el bote de tinta y la sacío después, rasgando después con ésta el papel mientras escribía con aquella letra pulcra y estilizada, correcta en su uso, lo que culminaba sus informes de la úlima misión hecha, lo pedido por el Comandante General Cross.

Finalmente se levantó y colocó cuidadosamente ambas pequeñas pilas de papeles. Echó una mirada a las fotos en las que salía con su hermano y con Kanda Yuu, respectivamente, antes de salir cerrando la puerta del Despacho suavemente y con un sello para que no entrase nadie.